Wednesday, August 23, 2006

El Sur

Querido Agustín, una vez, hace ocho años, decidí no esperar nunca nada de ti. Me encontraba entonces muy sola, mucho más de lo que tú podías sospechar. Y no fue fácil, pero poco a poco lo conseguí. En ese tiempo tú no has dado señales de vida. Era normal. Las cosas entre los dos se habían puesto muy difíciles. Y además, a tú lado existían otras personas que te importaban más que yo. Lo comprendí. Traté de aceptarlo y eso me ayudó. En cambio, fíjate. Comprendo mucho menos esta carta tuya que acabo de recibir.
¿Por qué, Agustín, después de tanto tiempo? ¿A santo de qué? ¿Saber si estoy viva? Pues sí, lo estoy, pero y qué más. Me resisto a creer que la culpa de todo la tenga esa magia del cine de la que hablas […] he andado de la Zeca a la Meca pero no he encontrado ese sitio, ¿te acuerdas?, del que ya nunca se quiere regresar. Me pregunto si existe de verdad. Así que, aquí estoy, en casa otra vez. El pasado ya no me conmueve como antes y, sobre todo, no quiero darle más vueltas. Intento mirar hacia delante y mucho me temo que, por fin, me he hecho mayor. […]
[…] creo que he caído en una trampa sin darme cuenta. Vuelvo a recordar el pasado. Gastabas tú bromas de dudoso gusto. Tuya es la culpa, porque hay que ver las cosas que escribes. En resumidas cuentas, ¿qué quieres de mí? Bueno, es mejor que no respondas a esta pregunta. No merece la pena. Olvídala, por favor. Sinceramente preferiría que no me escribieras. Contestarte me cuesta un esfuerzo tan grande.
El tiempo, Agustín, es el más implacable justiciero que he conocido y, aunque ya soy mayor, a veces, sobre todo de noche, tengo miedo.

2 Comments:

Blogger Little Padawan said...

Siempre hay un futuro limpio e impecable, apuntito para ser estrenado. No te dejes arrastrar por el pasado. Mira de frente y piensa... que la vida no se acaba en el pasado.

1:03 PM  
Anonymous Anonymous said...

Pero no me digas que no vale la pena volver, según que caso claro. En el caso del post, al año 1983, año de realización de esta magnífica obra, a mi parecer, del maestro Erice. Me encantó (y de hecho, me he puesto a frikear: En er mundo, de Joaquín Quintero. Excelente pasodoble torero, música de una época)

Nos vemos,Z!

2:26 PM  

Post a Comment

<< Home