Friday, March 31, 2006

Impotència

Cercant paraules,
lluitant amb els pensaments i,
res, res.

No aconseguir nuar caps,
no poder teixir,
perdre la capacitat de narrar.
Buit, buit.

Sentir, sentir, sentir,
no poder escriure,
no trobar sentit.

Thursday, March 30, 2006

La pasión de la mirada

Ensayo contra las ciencias frías

Para abrirnos los ojos no conozco otro medio que el poner al frente al Otro frente a nosotros, aunque sólo sea para hacer que nuestras pupilas merezcan este nombre [...] Lo malo es que lo que nos es extraño nos atemoriza, y la parte del Otro que aparece a nuestro lado destruye la certidumbre de que somos únicos.

Pascal Dibie

Wednesday, March 29, 2006

El desencanto

(Documental de Jaime Chávarri, 1976)
En la niñez vivimos, y después sobrevivimos.

Leopoldo María Panero

Monday, March 27, 2006

Ales o mans

No tenir-te…I de sobte
trobar-me amb una
soledat feta a mida per a mi,
trobar-la en cada vidre de la nit,
en el lliri que s’obri i trenca l’aire,
en un record,
en tots els foradets de la memòria,
trobar la soledat que convenia
a un ordre d’amargor, d’arrels crispades.
No tenir-te…I de sobte
no tenir-me.


Joan Fuster

Sunday, March 26, 2006

Guía irreverente para la vida

10
Las reglas del cerdo

a. Un cerdo no es un cisne*. A lo largo de la vida, uno puede topar con unos cuantos cerdos – de auténtica mala reputación – y sentirse tentado a mostrarse amable con ellos al creer que, si se los trata bien, tal vez no sean tan cerdos y quizás incluso mejoren su actitud. (En este punto hay que reírse con ganas). Al igual que en la regla número 3, es la clase de optimismo que debería ser considerada una especie de delito. Un cerdo sierre es un cerdo. Un cerdo está totalmente formado a los tres años, y sin duda al crecer no va a convertirse en un ser virtuoso simplemente porque uno deposite en él sus esperanzas. A decir verdad, sólo uno de cada mil millones de cerdos es susceptible de mejora, así que ¿para qué molestarse? Incluso si te equivocaras en uno o dos casos, vivirás más tiempo, lo que, vuelvo a recordártelo, es tu objetivo.

b. A un cerdo se le conoce, precisamente, por ser un cerdo. Tal vez pienses que aunque tú reconoces a un cerdo por lo que es, otros no son capaces de hacerlo. Tal vez pienses, por tanto, que habrá personas que, cuando el cerdo te ponga de vuelta y media a tus espaldas, aceptarán tranquilamente su cochina opinión. Me temo que no. Todo el mundo conoce a los cerdos, por lo que son. Un cerdo no se ha hecho famoso por comportarse asquerosamente sólo contigo. Puedes volverle la espalda sin correr peligro.

c. Cuando un cerdo se comporta de manera zalamera. Sigue siendo un cerdo.

d. Un cerdo es un cerdo en todo momento. Aunque quizá recuerdes que un cerdo no es un cisne, sí puedes olvidar que un cerdo no deja nunca de ser un cerdo. Tu fallo de memoria tal vez se deba a que no te está haciendo cerdadas a ti personalmente, o a que de momento ha olvidado su naturaleza cerduna y se conduce como un ser humano decente. Sabes perfectamente que un cerdo es un cerdo. Pero como en ese momento no hace nada malo, dejas que tu inteligencia se relaje. Puede que estés tan embaucado que incluso le hagas un favor.


* Se trata de un juego de palabras intraducible: A swine is not a swan. La palabra que emplea aquí el autor, swine, tiene el doble significado de “cerdo” como animal, pero también el figurado de “canalla”. (N. del T.)


26
No frecuentes a gente que habla de sus carreras

No sólo se trata de personas en absoluto interesantes de por sí, sino que, además, no les interesa nada interesante. A menudo forman una camarilla, supuestamente para el disfrute social, pero en realidad lo hacen para promocionarse y para protegerse. En ocasione, estas pequeñas reuniones parecen basadas en un afecto mutuo, pero en realidad su pilar es la idea de que el valor de cada uno de sus miembros consiste en lo que ha conseguido, lo que está consiguiendo, o lo que pueda hacer por los otros miembros.

Procura tratar con gente a la que le interese el mundo que se extiende más allá de sí mismo; alguien que no te pregunte en qué estás trabajando en ese momento, que nunca se interese por el éxito de tu último proyecto, que nunca utilice la palabra “carrera” como algo de valor; sólo alguien así podrá ser tu amigo.

Roger Rosenblatt

Tuesday, March 14, 2006

Los Nadies

En El Libro de los abrazos

¡Que no son, aunque sean.
Que no hablan idiomas, sino dialectos.
Que no profesan religiones, sino supersticiones.
Que no hacen arte, sino artesanía.
Que no practican cultura, sino folclore.
Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
Que no tienen cara, sino brazos.
Que no tienen nombre, sino número.
Que no figuran en la historia universal,
sino en la crónica roja de la prensa local.
¡Los nadies !
Eduardo Galeano

Monday, March 13, 2006

El azar y la necesidad

(Relatos clínicos, Sigmund Freud)

Pero si la lectura de este libro resulta apasionante por la mera peripecia vital de los personajes que desfilan a través de sus páginas, no lo es menos si nos dedicamos a escuchar la voz del narrador (Freud) y nos preguntamos por qué nos cuenta todo esto: quizá porque constituye uno de los modos de contarnos su vida. En efecto, a medida que nos relata el conflicto de Catalina, de Lucy, de Rosalia y del resto de los parcientes que atraviesan su obra, asistimos también a la lectura de la gran "novela" del psicoanálisis, lo qu es tanto como viajar desde la hipnosis al método catártico y desde éste a la asociación libre, pero también desde el mapa del cuerpo, con su cojunto de síntomas, al territorio inmaterial del inconsciente.

Relatos clínicos, pues, se trata de un volumen condenado a gustar a un registro muy amplio de lectores, sin olvidar desde luego al hipocondriaco que puede hallar en él una curiosa colección de síntomas con los que enriquecer su propio cuadro.

Prólogo de Juan José Millás

Tuesday, March 07, 2006

Manifiesto subnormal

TEXTO CONMEMORATIVO de la edificación de una ciudad de laminado plástico, provista de central ordenadora de felicidad urbana electrosónica que conseguía para contrarrestar el efecto de un cielo muerto, sin pájaros, ni estrellas, ni enramadas, en el que no cabía ni el miedo ni el valor.

Manuel Vázquez Montalbán

Sunday, March 05, 2006

Libertad bajo palabra

Allá, donde los caminos se borran, donde acaba el silencio, invento la desesperación, la mente que me concibe, la mano que me dibuja, el ojo que me descubre. Invento al amigo que me inventa, mi semejante; y a la mujer, mi contrario: torre que corono de banderas, muralla que escalan mis espumas, ciudad devastada que renace lentamente bajo la dominación de mis ojos.

Contra el silencio y el bullicio invento la Palabra, libertad que se inventa y me inventa cada día.

Octavio Paz

Blanco

No pienso, veo
- No, lo que ves,
Los reflejos, los pensamientos, veo.
Las precipitaciones de la música,
El número cristalizado.
Un archipiélago de signos.

Aerofonía,
Boca de verdades,
Claridad que se anula en una sílaba,
Diáfana como el silencio
No pienso, veo

- No lo que pienso,
La cara en blanco del olvido,
El resplandor de lo vacío.
Octavio Paz

Saturday, March 04, 2006

La soledad era esto

Bueno, pues la soledad era esto: encontrarte de súbito en el mundo como si acabaras de llegar de otro planeta del que no sabes por qué has sido expulsada. Te han dejado traerte dos objetos (en mi caso, la butaca y el reloj) que tienes que llevar a cuestas, como una maldición, hasta que encuentres un lugar en el que recomponer tu vida a partir de esos objetos y de la confusa memoria del mundo del que procedes. La soledad es una amputación no visible, pero tan eficaz como si te arrancaran la vista y el oído y así, aislada de todas las sensaciones exteriores, de todos los puntos de referencia, y sólo con el tacto y la memoria, tuvieras que reconstruir el mundo, el mundo que has de habitar y que te habita.

Juan José Millás

Friday, March 03, 2006

Conocimiento «inútil»

El conocimiento de hechos curiosos no sólo hace menos desagradables las cosas desagradables, sino que hace más agradables las cosas agradables. Yo encuentro mejor sabor a los melocotones y a los albaricoques desde que supe que fueron cultivados inicialmente en China, en la época de la dinastía Han; que los rehenes chinos en poder del gran rey Kaniska los introdujeron en la India, de donde se extendieron a Persia, llegando al Imperio romano durante el siglo I de nuestra era; que la palabra «albaricoque» se deriva de la misma fuente latina que la palabra «precoz», porque el albaricoque madura tempranamente, y que la partícula inicial «al» fue añadida por equivocación, a causa de una falsa etimología. Todo esto hace que el fruto tenga un sabor más dulce.

Bertrand Russell

Thursday, March 02, 2006

Elogio de la ociosidad

La vida de universidad es, en definitiva, tan diferente de la vida en el mundo, que las personas que viven en un mundo académico tienden a desconocer las preocupaciones y los problemas de los hombres y las mujeres corrientes; por añadidura, sus medios de expresión suelen ser tales, que privan a sus opiniones de la influencia que debieran tener sobre el público en general. […] Las instituciones académicas, por tanto, si bien son útiles, no son guardianes adecuados de los intereses de la civilización en un mundo donde todos los que quedan fuera de sus muros están demasiado ocupados para atender a propósitos no utilitarios.

Bertrand Russell

Wednesday, March 01, 2006

Si em necessites, xiula

¿Qui era Montserrat Roig?
I
De quan arrencaven l’ànima a la gent

“No puc recordar de què parlàvem, perquè el ritme era vertiginós: ambdues canviàvem de tema i saltàvem d’aquí a allà amb una facilitat que marejava els nostres amics. De segur que parlàvem de política i de segur que parlàvem de literatura, però també parlàvem de la perruqueria, de tipus de depilació o de quina mena d’homes ens agradaven. Recordo el sentit de confort que hi havia, aquella situació en què pots parlar lliurement sense témer veure un nas arrufat ni sentir una desqualificació rotunda. Hi ha poquíssima gent que sàpiga escoltar amb la mateixa atenció, que et respecti de debò i que esperi ser respectat en la mateixa mesura.”
Isabel-Clara Simó